Al contrario de cualquier otra Ley esta solo tiene un artículo único, no está aprobada por las Cortes, ni publicada en el Boe, ni ha necesitado el concenso de nadie más que el de un servidor.
En mi más de medio siglo de vida, he podido sufrir en mis carnes su desagradable efecto en cientos de ocasiones.
Básicamente la llamo igualmente: "la ley del jefe".
La lógica, el razonamiento, el sentido común o la sensatez no intervienen para nada en estas decisiones.
Sencillamente, y por encima de todo el :"esto es así porque lo digo YO", o lo que es igual: "Esto es así por MIS cojones".
Simple como ella misma.
Simple como ella misma.
