MI ALEGORÍA AL VINO
Beber, es un acto que realizan las razas de linaje antiguo.
Cuando se hace uso del vino, moderadamente, como todo en la vida, es:
Salud, y medicina.
Exalta el sentido genético, la amistad, y la facilidad de palabra.
Estimula el sentido nervioso, rinde fácil a la elocuencia, empuja a la benevolencia, predispone a la asociación, al perdón y al heroísmo.
El vino, exalta la fantasía, hace lúcida la mente, aumenta la alegría, y la melancolía, destruye los dolores, concilia el sueño, conforta la vejez y da sentido de euforia por donde la vida trasncurre, leve suave y tranquila.
“ EL BUEN VINO, NO MERECE PROBARLO QUIEN NO SABE PADALEARLO.”
“Salud y disfrute”
EL CORONEL
sábado, abril 21, 2007
LOS " GRAFFITISTAS " DE MI PUEBLO
LOS GRAFFITIS DE MI
PUEBLO
(PODRIA SER CUALQUIERA DE NUESTRA GEOGRAFIA)
Que nos guste mas o menos, eso son harinas de otros costales, lo que considero una verdad, -al menos para mi- es que un graffiti bien hecho es una obra de arte, por tanto, el que lo hace es un artista, y repito, que nos guste mas o menos, es cosa distinta.
Supongo que para poder hacer esos murales hay que tener creatividad, visión de artista, sentido de la profundidad, de la altura, del espacio, fluidez mental, etc etc.
Debe ser complicado, porque a 50 cms, de la pared no ves nada mas que colores, y los “pinceles”, son difíciles de manejar.
Sin embargo cuando nos retiramos unos metros, aparece el verdadero sentido y valor de la obra; es entonces cuando se pueden apreciar, todos los detalles.
Supongo de nuevo, que la “culturilla” personal algo tendrá que ver en todo esto, algún aprendizaje debe haber, y después, por supuesto está su desarrollo personal, donde el artista pone su sello.
Lejos de parecer paredes pintarrajeadas, o suelos, lo que ha hecho un artista, a casi todos nos gusta.
A mi, personalmente, algunos de ellos me parecen formidables, auténticas obras de arte, y si no me crees te invito a que busques en Google a este persosnaje: JULIANBEEVER_dibujosenlaacera.pps, veas lo que hace, y entonces, solo entonces, podras hacer comparaciones con estos que he colocado en esta pagina de los grafiitis de mi pueblo, dignos de admiración, a la vez que dan vida y color a un espacio muerto.
¿Veis alguna diferencia?.
Que nos guste mas o menos, eso son harinas de otros costales, lo que considero una verdad, -al menos para mi- es que un graffiti bien hecho es una obra de arte, por tanto, el que lo hace es un artista, y repito, que nos guste mas o menos, es cosa distinta.
Supongo que para poder hacer esos murales hay que tener creatividad, visión de artista, sentido de la profundidad, de la altura, del espacio, fluidez mental, etc etc.
Debe ser complicado, porque a 50 cms, de la pared no ves nada mas que colores, y los “pinceles”, son difíciles de manejar.
Sin embargo cuando nos retiramos unos metros, aparece el verdadero sentido y valor de la obra; es entonces cuando se pueden apreciar, todos los detalles.
Supongo de nuevo, que la “culturilla” personal algo tendrá que ver en todo esto, algún aprendizaje debe haber, y después, por supuesto está su desarrollo personal, donde el artista pone su sello.
Lejos de parecer paredes pintarrajeadas, o suelos, lo que ha hecho un artista, a casi todos nos gusta.
A mi, personalmente, algunos de ellos me parecen formidables, auténticas obras de arte, y si no me crees te invito a que busques en Google a este persosnaje: JULIANBEEVER_dibujosenlaacera.pps, veas lo que hace, y entonces, solo entonces, podras hacer comparaciones con estos que he colocado en esta pagina de los grafiitis de mi pueblo, dignos de admiración, a la vez que dan vida y color a un espacio muerto.
¿Veis alguna diferencia?.
Esto si es una pared pintarrajeada, que delata la mas profunda incultura en todos los sentidos de quien, o quienes lo han hecho.
Por desgracia, tenemos muchos de estos “graffitistas” alrededor nuestro, que deambulan de casa al Instituto, en un acto de pérdida de tiempo sin precedentes.
Padres demasiado ocupados, o absolutamente despreocupados, que se resignan a ser los responsables de la conducta de su prole, culpando a la Sociedad, de sus fracasos,(que para eso la hemos inventado, parece).
Estoy convencido, que ninguno de estos progenitores, sabe de “los alcances” de su hijo ni de sus “obras de arte”, y de saberlo, seguramente lo defendería a capa y espada.
Y no dejaria de llevar razón, si acudimos al chistecillo aquel, donde un hojalatero se encontraba en su faena, dando martillazos sobre una chapa que se le resistía en ponerse plana, cuando pasó en ese momento un avión, surcando el cielo, y este hombre, alzó la vista, y ni corto ni perezoso dijo:”hay que ver lo que hacemos los mecánicos”.
Lo malo de esto, es que lo segundo es un chiste, y lo primero una realidad, cuanto menos preocupante.
Diremos como solían decir nuestros abuelos: “que Dios nos pille confesaos, porque lo que se nos avecina……………”
La moraleja:
Si entre todos, dejamos de culpar a la bestia que hemos creado para cosas como esta, llamada sociedad, entonamos el mea culpa, y ponemos de nuestra parte, quizá, consigamos algo positivo, y podamos seguir disfrutando, obras de arte en nuestras calles.
Así lo veo yo, ¿y tu?.
Un abrazo de tu amigo
EL CORNEL
domingo, abril 15, 2007
LA CARRETERA DE LA COSTA
GRANADA : UNO , JAPÓN : CERO
Vamos a ver si me explico:
El otro día entré en una casa de coches japoneses.
El vendedor, me dio una disertación de su buen hacer, y saber, y entre las alabanzas que le hacía a su marca, -como corresponde a todo buen profesional-,
Una de las características sobre la seguridad, en la conducción, pioneras de esta marca, era un dispositivo de seguridad pionero, que cuando el coche detecta que has pisado la raya blanca automáticamente te corrige y te coloca en el centro del carril (no es coña, ya está esto en el mercado),
Entonces- le dije yo :” cuando están los conos, de la costa, lo único que puedo es ocasionar un accidente, porque ya me dirá usted, la papeleta, de ir siempre por encima de una raya, y ahora quien le explica a los japoneses que su invento en España no funciona, que en esta España nuestra, hay carreteras en las que tienes que circular con la raya entre “las piernas”, ¿Quién le explica esto?, y ¿Dónde es eso? Preguntarían,…….. pues ¡¡¡ donde va a ser ¡¡¡¡ alma de Dios, “en la única ciudad del mundo donde todo es posible . ¡¡ EN GRANADA ¡¡.
Sabiendo esto, al igual que el Dakar es un “laboratorio”, sobre el comportamiento de todas las partes del vehículo, la carretera de la costa, en verano, ¿Por qué no puede ser otro laboratorio, de pruebas, para saber cual es exactamente el comportamiento de este invento en condiciones tan africanas como nuestra carretera?.
Invito a la meditación.
Un saludo, sin pisar la raya.
ELCORONEL
Vamos a ver si me explico:
El otro día entré en una casa de coches japoneses.
El vendedor, me dio una disertación de su buen hacer, y saber, y entre las alabanzas que le hacía a su marca, -como corresponde a todo buen profesional-,
Una de las características sobre la seguridad, en la conducción, pioneras de esta marca, era un dispositivo de seguridad pionero, que cuando el coche detecta que has pisado la raya blanca automáticamente te corrige y te coloca en el centro del carril (no es coña, ya está esto en el mercado),
Entonces- le dije yo :” cuando están los conos, de la costa, lo único que puedo es ocasionar un accidente, porque ya me dirá usted, la papeleta, de ir siempre por encima de una raya, y ahora quien le explica a los japoneses que su invento en España no funciona, que en esta España nuestra, hay carreteras en las que tienes que circular con la raya entre “las piernas”, ¿Quién le explica esto?, y ¿Dónde es eso? Preguntarían,…….. pues ¡¡¡ donde va a ser ¡¡¡¡ alma de Dios, “en la única ciudad del mundo donde todo es posible . ¡¡ EN GRANADA ¡¡.
Sabiendo esto, al igual que el Dakar es un “laboratorio”, sobre el comportamiento de todas las partes del vehículo, la carretera de la costa, en verano, ¿Por qué no puede ser otro laboratorio, de pruebas, para saber cual es exactamente el comportamiento de este invento en condiciones tan africanas como nuestra carretera?.
Invito a la meditación.
Un saludo, sin pisar la raya.
ELCORONEL
LA CARRETERA DE LA PLAYA
LA PUÑETERA CARRETERA DE LA PLAYA
Fin de un verano más de suplicio, un año mas de rabia contenida, un año mas de “¡¡ coño ¡¡” aquí esta la cola, “me cago en la mae que parió al demonio “.
Un año más de vergüenza torera, si además, lees en el periódico (como el 23-08-2006), que lleva 20 (veinte) años sin salir a concurso el tramo Herradura ……. Te entra un no se que por el cuerpo…..…. Sin comentarios.
Ya estoy tan acostumbrado a las caravanas que me sorprendo cuando no hay.
La última vez que “pillé” una, (hace un rato mismamente), cuando llegamos a la Herradura, casi tuvimos que tirar la compra, los yogures llegaron caducaos, la sandía , “chocha”, pa hacer sopa, los plátanos negros como el coche de delante, (por cierto se me hasta la anchura de los neumáticos), y unas tortas exquisitas de mi Alfacar, fueron las que aguantaron estóicamente el camino.
“LOS CONOS DE LA COSTA TROPICAL”.
Ya no se si pisar la raya blanca es bueno o malo(cuantos puntos?),si en esas “entremedias” me encuentro un ciclista o “ una motillo” ¿ que coño hago?,.
Cuando te tocan los 2 carriles, te encuentras a tu derecha a los “acojonaos” (que somos todosssss), en fila india perfecta, pegaitos pegaitos al guardarrail ,por tu izquierda pasan los de “allá voy , que sea lo que Dios, la Virgen y todos los Santos quieran, y entre rozar unos conos , pisar otros caídos y aferrarse al volante, aún da tiempo a ver las caras de los que van en sentido contrario: agarraos al rosco en actitud de estreñimiento puro y duro, con los ojos como brótolas, que se quieren salir de su órbita, - por supuesto sin pestañear- echaos casi encima del volante, en otra rara actitud de querer dar con la cabeza en el parabrisas, y refunfuñando, a boca tendida (seguro que en recordatorio de los difuntos , y vivos) de políticos varios, por tener así de revuelta, esta merienda de blancos, que son los archiconocidos, “conos de la costa”.
Claro, que como todo en la vida, el sabio refrán de “no hay mal que por bien no venga”, también aquí funciona . Me explico.
Seguramente casi todos recordamos esos fines de semana, (hace poco), en los que el tramo Salobreña-Nerja era casi de ficción.
Al desembocar de la Azud de Vélez, debajo del puente nos encontrábamos , unas pandillas de motoristas, (aunque en absoluto les corresponde ese apelativo, porque la moto es algo mas bonito y respetuoso que eso), enfundaos en sus monos, esperando al resto, calentando sus monturas y preparándose para “su carrera”.
Esta consistía en ver quien llagaba primero a Nerja o Salobreña;( queriendo así emular a los pilotos de carreras de motos), hacían sus apuestas- fuertes sumas de dinero
La carretera les servía de improvisado circuito de carreras, su aventura particular, y para los conductores era nuestra ruleta particular.
¡¡Vamos¡¡ que un solo “valiente” de estos era capaz de acojonar a toda una familia y a dos y a tres.
Recuerdo un domingo de esos que yendo dirección la Herradura, ví venir por allí enfrente, a tres de esos “valientes”, y que en un pis pas los tenia encima,, me agarré al volante, cerré los ojos y al abrirlos descubrí por el retrovisor que habían pasado los tres, no se como, ni por donde y que saltaban chispas del asfalto en contacto con la moto
Ellos, siguieron su maldita carrera, pero yo sin embargo, tuve que parar porque literalmente , y con perdón,“me cagué”, lo contrario sería mentir.
Pues hoy , señores míos esto ya no es así “gracias” al follón de coches que atascamos la carretera y no dejamos a estos chulos de pacotilla, también hijos de la gran majada ,que sigan con sus fechorías.
La cosa terminaba, ya por la tarde coincidiendo con la vuelta a casa, te los volvías a encontrar debajo del puente, (ahora repartiendo el dinerito ganado), y ya sin casco veías los grandes cordones de oro, 10 sortijas, y…… (alguien me contó que poco tiempo después la moto verde pasó a ser un montoncito de chatarra y su piloto uno mas en el Campo Santo, y otra Cruz con flores más en la cuneta. Paradojas de la vida.
(si en algo miento, que me corten la coleta)
Un saludo
ELCORONEL
Fin de un verano más de suplicio, un año mas de rabia contenida, un año mas de “¡¡ coño ¡¡” aquí esta la cola, “me cago en la mae que parió al demonio “.
Un año más de vergüenza torera, si además, lees en el periódico (como el 23-08-2006), que lleva 20 (veinte) años sin salir a concurso el tramo Herradura ……. Te entra un no se que por el cuerpo…..…. Sin comentarios.
Ya estoy tan acostumbrado a las caravanas que me sorprendo cuando no hay.
La última vez que “pillé” una, (hace un rato mismamente), cuando llegamos a la Herradura, casi tuvimos que tirar la compra, los yogures llegaron caducaos, la sandía , “chocha”, pa hacer sopa, los plátanos negros como el coche de delante, (por cierto se me hasta la anchura de los neumáticos), y unas tortas exquisitas de mi Alfacar, fueron las que aguantaron estóicamente el camino.
“LOS CONOS DE LA COSTA TROPICAL”.
Ya no se si pisar la raya blanca es bueno o malo(cuantos puntos?),si en esas “entremedias” me encuentro un ciclista o “ una motillo” ¿ que coño hago?,.
Cuando te tocan los 2 carriles, te encuentras a tu derecha a los “acojonaos” (que somos todosssss), en fila india perfecta, pegaitos pegaitos al guardarrail ,por tu izquierda pasan los de “allá voy , que sea lo que Dios, la Virgen y todos los Santos quieran, y entre rozar unos conos , pisar otros caídos y aferrarse al volante, aún da tiempo a ver las caras de los que van en sentido contrario: agarraos al rosco en actitud de estreñimiento puro y duro, con los ojos como brótolas, que se quieren salir de su órbita, - por supuesto sin pestañear- echaos casi encima del volante, en otra rara actitud de querer dar con la cabeza en el parabrisas, y refunfuñando, a boca tendida (seguro que en recordatorio de los difuntos , y vivos) de políticos varios, por tener así de revuelta, esta merienda de blancos, que son los archiconocidos, “conos de la costa”.
Claro, que como todo en la vida, el sabio refrán de “no hay mal que por bien no venga”, también aquí funciona . Me explico.
Seguramente casi todos recordamos esos fines de semana, (hace poco), en los que el tramo Salobreña-Nerja era casi de ficción.
Al desembocar de la Azud de Vélez, debajo del puente nos encontrábamos , unas pandillas de motoristas, (aunque en absoluto les corresponde ese apelativo, porque la moto es algo mas bonito y respetuoso que eso), enfundaos en sus monos, esperando al resto, calentando sus monturas y preparándose para “su carrera”.
Esta consistía en ver quien llagaba primero a Nerja o Salobreña;( queriendo así emular a los pilotos de carreras de motos), hacían sus apuestas- fuertes sumas de dinero
La carretera les servía de improvisado circuito de carreras, su aventura particular, y para los conductores era nuestra ruleta particular.
¡¡Vamos¡¡ que un solo “valiente” de estos era capaz de acojonar a toda una familia y a dos y a tres.
Recuerdo un domingo de esos que yendo dirección la Herradura, ví venir por allí enfrente, a tres de esos “valientes”, y que en un pis pas los tenia encima,, me agarré al volante, cerré los ojos y al abrirlos descubrí por el retrovisor que habían pasado los tres, no se como, ni por donde y que saltaban chispas del asfalto en contacto con la moto
Ellos, siguieron su maldita carrera, pero yo sin embargo, tuve que parar porque literalmente , y con perdón,“me cagué”, lo contrario sería mentir.
Pues hoy , señores míos esto ya no es así “gracias” al follón de coches que atascamos la carretera y no dejamos a estos chulos de pacotilla, también hijos de la gran majada ,que sigan con sus fechorías.
La cosa terminaba, ya por la tarde coincidiendo con la vuelta a casa, te los volvías a encontrar debajo del puente, (ahora repartiendo el dinerito ganado), y ya sin casco veías los grandes cordones de oro, 10 sortijas, y…… (alguien me contó que poco tiempo después la moto verde pasó a ser un montoncito de chatarra y su piloto uno mas en el Campo Santo, y otra Cruz con flores más en la cuneta. Paradojas de la vida.
(si en algo miento, que me corten la coleta)
Un saludo
ELCORONEL
MIGUEL PIMENTON Y LAS "ARBONDIGAS" ALEMANAS
MIGUEL “PIMENTÓN “ Y LAS “ARMÓNDIGAS” ALEMANAS
Antes de comenzar el artículo, quiero dejar claro que intento hacer una transcripción lo mas fidedigna posible, con las palabras empleadas por el personaje protagonista.
Ya no está en activo, pero sigue siendo bombero, porque la profesión, también se lleva por dentro.
Miguel “el pimentón” pa los amigos.
Mas de 1.80 de estatura y peso proporcional a tal talleje, pero mas sano, mas noble, bruto y buena persona, que Obelix.
Tuvo que emigrar a Alemania, en los años 60-70, como casi todo el mundo por aquel entonces.
Destino: la construcción, - de nuevo, como casi todo el mundo-.
La intención, era la de ahorrar para comprar aquí un terreno y hacerse una casa, en su pueblo de su alma, y a partir de ahí, seguir su vida en la tierra que le vió nacer.
Yo tuve la oportunidad de conocerlo, un día que fui a hacer una visita a mi hermano- bombero también- al antiguo Parque de Bomberos.
“Niño, ven pacá que te voy a contar una cosa, mientras hacemos la comía”, - me dijo, como si nos conociéramos de to la vida-.
“Estamos preparando una olla de potaje de habichuelas, como un copón, quéate a comer con nosotros, niño”, - no, muchas gracias , le contesté.
“Niño, verás lo que me pasó en Alemania”, -me dice-
“mavía io yo, a trabajar a la obra, con otros tres de mi pueblo, allí, nos metimos en un piso con otro que llevaba mas de un año trabajando, y fue el que nos preparó los papeles, pa trabajar.
Al cabo de un par de meses, un domingo, tocaron el la puerta, por la mañana, ¿Quién pollas será ahora?, me pregunté yo.
Abrimos, y era una vieja que vivía en el piso de al lado nuestro, venía hecha un cromo,¿sabes, niño?, con una bata de guatiné hasta los tobillos, mas fea que su puta madre- nunca supe, si se refería a la bata, o a la vieja, pero creo, que a las dos por igual-, con una malla en la cabeza, niño, como las de las que traen ahora modernamente, las papas que venden en los supermercados, que sería pa aguantar mas de mil rulos que tenía liaos en el pelo.
Venían dos policías, con ella. La vieja no paraba de rabiar con nosotros y señalar pa dentro de la casa. Como yo no entendía una polla, lo que hablaba, pues cuando se jarte, de cascar, ya parará, la polla la vieja esta. Me decía yo.
En ese momento llegó er Manolo, que era el único que parchivelaba el guiri- hablar otro idioma-.
La policía, le dijo, que tenían que entrar en el piso, porque la aguela nos había denunciao porque teníamos un perro.
“Nujotros un peeerro, ¿ande pollas está?- a mi no me entendieron, niño-.
Entraron en la casa y vieron habitación por habitación, y al ver que no había ni rastros del can, le dijeron a la vieja:” Señora usted está equivocada, porque aquí no hay ni señales, de perros”.
Pero niño, la polla la vieja, dale que te pego, que por cohones allí había un perro, y tenía que ser grande, decía la ilipollas.
Entonces, los policías, también cabreaos, le dijeron : “amos a ver señora, ¿en que se basa usté, pa decir lo del perro, tan segura?”
La vieja, soltó dos bufíos, cogió del brazo, a los policías, y tiró pa un patio chiquitillo, que había detrás de la casa, que tenía unos bidones, pa meter cosas viejas, y luego, un día a la semana se tiraban a la basura.
Entonces, había un montón de latas vacías de las grandes, de 5 kilos.
La vieja, no paraba de refunfuñar, señalando las latas.
La policía, el dice al Manolo : “Esta señora dice que aquí tiene que haber un perro grande, porque si no, que hacen aquí tantas latas de comida para perros.”
“Que comía pa perros, ni que pollas, eso son latas de armóndigas, nuestras”.
La vieja abrió la boca, y se tragó to el aire que había en el patio. Los policías se iban a partir el culo de la risa, y nosotros mas serios quer copón, niño.
Cuchi, que pollas, las armóndigas eran COMÍA PA LOS PERROS, niño, y yo que pollas iba a saber que en Alemania, los perros comían armóndigas, si mi máma, no las hacía en mi casa, nunca, la criatura, porque no teníamos un duro.
Ahora entiendo, cuando iba al super, y llenaba el carro de latas, que la señorita de la caja me miraba mu seria, como diciendo :¿Cuántos perros tendrá el tio este?, y yo, como no sabía alemán, ni pollas, yo veía las armóndigas dibujás en la lata, y al carro con ellas, que luego le dabas un calentón y estaban mas guenas quer copón, niño.
Lo que es no entender los idiomas, ¿sabes? – terminó diciéndome-
A mi me suele todavía el costao de la risa, y cada vez que lo contaba en el Parque , los compañeros se partían el culo de la risa.
A mi me hubiera pasado tres cuartos de lo mismo, ¿a ti no?.
Un saludo
EL CORNEL
Antes de comenzar el artículo, quiero dejar claro que intento hacer una transcripción lo mas fidedigna posible, con las palabras empleadas por el personaje protagonista.
Ya no está en activo, pero sigue siendo bombero, porque la profesión, también se lleva por dentro.
Miguel “el pimentón” pa los amigos.
Mas de 1.80 de estatura y peso proporcional a tal talleje, pero mas sano, mas noble, bruto y buena persona, que Obelix.
Tuvo que emigrar a Alemania, en los años 60-70, como casi todo el mundo por aquel entonces.
Destino: la construcción, - de nuevo, como casi todo el mundo-.
La intención, era la de ahorrar para comprar aquí un terreno y hacerse una casa, en su pueblo de su alma, y a partir de ahí, seguir su vida en la tierra que le vió nacer.
Yo tuve la oportunidad de conocerlo, un día que fui a hacer una visita a mi hermano- bombero también- al antiguo Parque de Bomberos.
“Niño, ven pacá que te voy a contar una cosa, mientras hacemos la comía”, - me dijo, como si nos conociéramos de to la vida-.
“Estamos preparando una olla de potaje de habichuelas, como un copón, quéate a comer con nosotros, niño”, - no, muchas gracias , le contesté.
“Niño, verás lo que me pasó en Alemania”, -me dice-
“mavía io yo, a trabajar a la obra, con otros tres de mi pueblo, allí, nos metimos en un piso con otro que llevaba mas de un año trabajando, y fue el que nos preparó los papeles, pa trabajar.
Al cabo de un par de meses, un domingo, tocaron el la puerta, por la mañana, ¿Quién pollas será ahora?, me pregunté yo.
Abrimos, y era una vieja que vivía en el piso de al lado nuestro, venía hecha un cromo,¿sabes, niño?, con una bata de guatiné hasta los tobillos, mas fea que su puta madre- nunca supe, si se refería a la bata, o a la vieja, pero creo, que a las dos por igual-, con una malla en la cabeza, niño, como las de las que traen ahora modernamente, las papas que venden en los supermercados, que sería pa aguantar mas de mil rulos que tenía liaos en el pelo.
Venían dos policías, con ella. La vieja no paraba de rabiar con nosotros y señalar pa dentro de la casa. Como yo no entendía una polla, lo que hablaba, pues cuando se jarte, de cascar, ya parará, la polla la vieja esta. Me decía yo.
En ese momento llegó er Manolo, que era el único que parchivelaba el guiri- hablar otro idioma-.
La policía, le dijo, que tenían que entrar en el piso, porque la aguela nos había denunciao porque teníamos un perro.
“Nujotros un peeerro, ¿ande pollas está?- a mi no me entendieron, niño-.
Entraron en la casa y vieron habitación por habitación, y al ver que no había ni rastros del can, le dijeron a la vieja:” Señora usted está equivocada, porque aquí no hay ni señales, de perros”.
Pero niño, la polla la vieja, dale que te pego, que por cohones allí había un perro, y tenía que ser grande, decía la ilipollas.
Entonces, los policías, también cabreaos, le dijeron : “amos a ver señora, ¿en que se basa usté, pa decir lo del perro, tan segura?”
La vieja, soltó dos bufíos, cogió del brazo, a los policías, y tiró pa un patio chiquitillo, que había detrás de la casa, que tenía unos bidones, pa meter cosas viejas, y luego, un día a la semana se tiraban a la basura.
Entonces, había un montón de latas vacías de las grandes, de 5 kilos.
La vieja, no paraba de refunfuñar, señalando las latas.
La policía, el dice al Manolo : “Esta señora dice que aquí tiene que haber un perro grande, porque si no, que hacen aquí tantas latas de comida para perros.”
“Que comía pa perros, ni que pollas, eso son latas de armóndigas, nuestras”.
La vieja abrió la boca, y se tragó to el aire que había en el patio. Los policías se iban a partir el culo de la risa, y nosotros mas serios quer copón, niño.
Cuchi, que pollas, las armóndigas eran COMÍA PA LOS PERROS, niño, y yo que pollas iba a saber que en Alemania, los perros comían armóndigas, si mi máma, no las hacía en mi casa, nunca, la criatura, porque no teníamos un duro.
Ahora entiendo, cuando iba al super, y llenaba el carro de latas, que la señorita de la caja me miraba mu seria, como diciendo :¿Cuántos perros tendrá el tio este?, y yo, como no sabía alemán, ni pollas, yo veía las armóndigas dibujás en la lata, y al carro con ellas, que luego le dabas un calentón y estaban mas guenas quer copón, niño.
Lo que es no entender los idiomas, ¿sabes? – terminó diciéndome-
A mi me suele todavía el costao de la risa, y cada vez que lo contaba en el Parque , los compañeros se partían el culo de la risa.
A mi me hubiera pasado tres cuartos de lo mismo, ¿a ti no?.
Un saludo
EL CORNEL
martes, abril 10, 2007
LAS PROCESIONES Y LAS " YOLIS "
LAS PROCESIONES Y LAS “ YOLIS”
Ya se que no hay ningún paso con este nombre, ¡¡hasta ahí llego ¡¡ no me echéis la bronca, que ahora me explico.
Antes de nada quiero dejar claro que o quien es una “YOLIS”.
Según el diccionario Granaino YOLI se refiere a la niñata de la periferia granadina, con ropas de lo mas variopinto, y salidas de la misma peluquería, los ojos pintados con rabos exagerados. Su físico, va, desde una delgadez casi famélica, a una gordura-sebosa, que no hay que adivinar, porque suelen llevar “sus carnes de flotador a la vista”, como lucimiento del sebo. (Debe ser).
Su diálogo-berborrea, raya la contaminación acústica, por lo elevado, y por su contenido, ya que la YOLI, también se distingue, porque, en dos de cada tres palabras que dice, aparece el término “pollas”.
Gustan estas señoritas, de ir acompañadas de jóvenes lumbreras, “LOS YOLOS”, licenciados en expulsiones de los Institutos, que auguran un prometedor porvenir delictivo, que nunca han trabajado,(ni trabajan), que nunca han estudiado (ni estudian), sin la mínima vocación hacia la cultura, los buenos modales o la vergüenza.
Bueno, pues una vez descrito, el arquetipo de personas a las que me voy a referir, paso al detalle procesional.
Estaba yo viendo una Procesión, el otro día, en cuarta o quinta fila, mas o menos y en la espera hasta ver pasar el Trono, dos viejecitas, menuditas ellas de tamaño, querían cruzar, a la otra parte, como hacemos casi todos, y el que no lo haya hecho que tire la primera piedra.
Poco a poco fueron escalando puestos, pidiendo el consabido “por favor, me deja pasar”, pero cuando llegaron al último escollo, lo que para un escalador sería llegar a la cima, se tropezaron, con que la primera fila, la flanqueaban cuatro criaturas de las descritas al principio, dos ellas y dos ellos.
Las señoras, como hicieran anteriormente, pidieron permiso, y entonces fue cuando una de las “YOLIS”, volvió la cabeza, miró con desprecio a las ancianas, y soltó, como es común en su verborrea un : “ y er coño de las viejas, que no ze paza¡¡¡”
Las pobres se quedaron allí sin decir nada- al menos yo no lo oí- y tampoco pudieron pasar, puesto que entre los cuatro insurrectos, hacían una pantalla mas que suficiente como para no impedir el paso.
Después, se acercaron dos parejas de alemanes- por el habla, digo – y yo les puse en sobreaviso. Que pueden ustedes pasar, pero que ahí delante hay problemas.
Efectivamente así fue, al llegar a la “muralla”, se volvió un “YOLO”, miró parriba al extranjero : “ cago en zu puta madre, otro ilipillas, aaaess”.
El hombre se volvió, y me indicó con su reloj que tenían la cena, en el restaurante de enfrente y no podían pasar por ningún sitio.
Al final, como pude le expliqué, que volviesen dos callas atrás, donde hubiese pasado ya el trono, y sería mas fácil.
Yo espero que este hombre no entendiera al YOLO, y si no fue asi, espero que no piensen que todos los “ispanich”, nos miramos en el mismo espejo que estos personajuchos de tres al cuarto.
Como la espera fue larga, al menos fue entretenida, y no faltó quien quiso ponerle a los cuatro los morros calientes, que tampoco hubiese estado mal.
Deduje, que eran costaleros de algún Trono, porque en su casi inantendible berborrea, pude oír algo así como que “nuestra víen mola mas questa, aaaes tía¡¡¡”.
Visto lo visto, y oído lo oído, me alegro de no ser costalero, por no tener “compis”, de esta calaña.
Esta vez, os invito que seáis vosotros lo que le pongáis la moraleja.
Un saludo
EL CORONEL
Ya se que no hay ningún paso con este nombre, ¡¡hasta ahí llego ¡¡ no me echéis la bronca, que ahora me explico.
Antes de nada quiero dejar claro que o quien es una “YOLIS”.
Según el diccionario Granaino YOLI se refiere a la niñata de la periferia granadina, con ropas de lo mas variopinto, y salidas de la misma peluquería, los ojos pintados con rabos exagerados. Su físico, va, desde una delgadez casi famélica, a una gordura-sebosa, que no hay que adivinar, porque suelen llevar “sus carnes de flotador a la vista”, como lucimiento del sebo. (Debe ser).
Su diálogo-berborrea, raya la contaminación acústica, por lo elevado, y por su contenido, ya que la YOLI, también se distingue, porque, en dos de cada tres palabras que dice, aparece el término “pollas”.
Gustan estas señoritas, de ir acompañadas de jóvenes lumbreras, “LOS YOLOS”, licenciados en expulsiones de los Institutos, que auguran un prometedor porvenir delictivo, que nunca han trabajado,(ni trabajan), que nunca han estudiado (ni estudian), sin la mínima vocación hacia la cultura, los buenos modales o la vergüenza.
Bueno, pues una vez descrito, el arquetipo de personas a las que me voy a referir, paso al detalle procesional.
Estaba yo viendo una Procesión, el otro día, en cuarta o quinta fila, mas o menos y en la espera hasta ver pasar el Trono, dos viejecitas, menuditas ellas de tamaño, querían cruzar, a la otra parte, como hacemos casi todos, y el que no lo haya hecho que tire la primera piedra.
Poco a poco fueron escalando puestos, pidiendo el consabido “por favor, me deja pasar”, pero cuando llegaron al último escollo, lo que para un escalador sería llegar a la cima, se tropezaron, con que la primera fila, la flanqueaban cuatro criaturas de las descritas al principio, dos ellas y dos ellos.
Las señoras, como hicieran anteriormente, pidieron permiso, y entonces fue cuando una de las “YOLIS”, volvió la cabeza, miró con desprecio a las ancianas, y soltó, como es común en su verborrea un : “ y er coño de las viejas, que no ze paza¡¡¡”
Las pobres se quedaron allí sin decir nada- al menos yo no lo oí- y tampoco pudieron pasar, puesto que entre los cuatro insurrectos, hacían una pantalla mas que suficiente como para no impedir el paso.
Después, se acercaron dos parejas de alemanes- por el habla, digo – y yo les puse en sobreaviso. Que pueden ustedes pasar, pero que ahí delante hay problemas.
Efectivamente así fue, al llegar a la “muralla”, se volvió un “YOLO”, miró parriba al extranjero : “ cago en zu puta madre, otro ilipillas, aaaess”.
El hombre se volvió, y me indicó con su reloj que tenían la cena, en el restaurante de enfrente y no podían pasar por ningún sitio.
Al final, como pude le expliqué, que volviesen dos callas atrás, donde hubiese pasado ya el trono, y sería mas fácil.
Yo espero que este hombre no entendiera al YOLO, y si no fue asi, espero que no piensen que todos los “ispanich”, nos miramos en el mismo espejo que estos personajuchos de tres al cuarto.
Como la espera fue larga, al menos fue entretenida, y no faltó quien quiso ponerle a los cuatro los morros calientes, que tampoco hubiese estado mal.
Deduje, que eran costaleros de algún Trono, porque en su casi inantendible berborrea, pude oír algo así como que “nuestra víen mola mas questa, aaaes tía¡¡¡”.
Visto lo visto, y oído lo oído, me alegro de no ser costalero, por no tener “compis”, de esta calaña.
Esta vez, os invito que seáis vosotros lo que le pongáis la moraleja.
Un saludo
EL CORONEL
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